Honrar al teatro, honrar la vida
Sobre Orfeo y Eurídice de César Brie
Por Vivi
Montes
Caronte
inaugura la pieza. Se trata de un Caronte con color local, un chango que nos introduce en los
pormenores de su labor como comandante de la barca que transporta a los muertos
al reino al que pertenecerán ya, para toda la eternidad, el Hades. Caronte nos
narra, también, aquella única vez en que un vivo accedió a esos territorios
infernales, envalentonado con el poder que otorga la desesperación, Orfeo
descendió al inframundo con su música para rescatar a su amada Eurídice.
Así
comienza la obra que luego da inmediato paso a la historia de amor entre Liza y
Sofía porque, acertadamente, esta versión del mito clásico construye la pareja
protagónica a través de dos mujeres que devendrán Orfeo y Eurídice con el
transcurrir de los sucesos. César Brie demuestra mediante esta impecable
elección que cualquier pareja clásica puede tener ya cualquier composición. Y
funciona, maravillosamente. La pareja femenina configura un universo de una dulzura
implacable y nutre a la historia de una ternura que no podría contener de
ninguna otra manera. Las actrices Sofía Diambra y Liza Taylor componen y actúan
sus personajes con compromiso y ductilidad, convirtiendo cada movimiento, cada
palabra y cada mirada en poesía viva que se despliega en la escena. El texto y
la música, compuesta por Pablo Brie, completan esta deliciosa puesta.
Orfeo y Eurídice está inspirada en un
caso real en el que un padre estuvo diecisiete años tratando de poner fin al
infierno en vida de su hija en estado vegetativo irreversible. En esta ocasión
la historia que se presenta es la de una pareja que se conoce, se enamora y
comienza a transitar un camino de vida, compañerismo y amor. Las fotos, cuadros
vivos que la luz agiganta proyectando las sombras de las protagonistas como una
presencia espectral, dan cuenta de las vivencias compartidas también de lo
perdido. Un accidente instala la tragedia, Sofía ingresa a un limbo lúgubre,
atroz, inalterable. Sofía se convierte en Eurídice y Liza en Orfeo, que no claudica
en su dolorosa lucha contra un sistema cuya razón de ser fue ya explicada por
Michel Foucault al señalar que la vieja forma monárquica de hacer morir y dejar
vivir fue reemplazada, ciencia mediante, por el hacer vivir y dejar morir.
Fórmula siniestra que cuida sus formas, pero en la que vivir se reduce a un
hilo lábil expresado en un latido débil que resulta de múltiples máquinas
responsables de sostenerlo en un tiempo indefinido. Años y años de un vida sin
vida… conseguir justicia…
Orfeo y Eurídice instala la cuestión
sobre la muerte digna, que no es otra que la cuestión de la vida digna. Despliega
la disputa entre el deseo y ciencia. Y erige, en el centro, la nobleza del amor
en un trabajo del que verdaderamente podemos decir que lo que hace es honrar al
teatro, honrar la vida.
Ficha
artístico técnica:
Actúan: Liza
Taylor y Sofía Diambra
Música
original: Pablo Brie
Prensa:
Simkin & Franco
Texto y
dirección: César Brie
Funciones
Viernes
23hs.
Teatro El
Extranjero (Valentín Gómez 3378)
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