miércoles, 3 de agosto de 2016

El salto al vacío. Sobre Hacía Vía de Gustavo Cornillón y Germán Rodríguez

El salto al vacío
Sobre Hacía Vía de Gustavo Cornillón y Germán Rodríguez
Por Vivi Montes

            Saltar al vacío. Fantasear con saltar o simplemente saltar sin saber qué hay más allá. Saltar a las vías, estar en la vía, vivir en la vía. Una vía río, como el Aqueronte, luego el olvido, luego retornar. Ver estallar una vida ante nuestros ojos y no poder evitarlo, no poder salvar al Otro. La muerte es pérdida, indudablemente. Pierden los que quedan el calor de ese cuerpo viviente, el dióxido de carbono que ese cuerpo arroja al ambiente en cada expiración… y mucho más. Pierde el que se va, desde la sensación al morder el sándwich de miga hasta los afectos. ¿Calma su dolor? ¿Libera su mente de las preocupaciones que agobian, de la vida que asfixia?
            De todas estas preguntas, de esos sentimientos profundos de dolor, de desesperación, de incertidumbre está hecha Hacia Vía. Con la fragmentación propia de la memoria que recuerda y olvida en simultáneo, que es borrosa y equívoca. Con el incesante retorno del trauma. Volver una y otra vez al mismo lugar, intentando respuestas, intentando decir algo que los traiga de vuelta. La puesta de Hacia vía explora poéticamente un universo difícil, un mundo oscuro como un túnel del que algunos podrán salir y otros no, tornándose una obra de alto impacto en la que texto, actuaciones, escenografía e iluminación se funden en un equilibrio punzante que sumerge, salpica y enfrenta al espectador.


Ficha  artístico técnica:

Actúan: Marcelo Aruzzi, Camila Brecht, Melania Miñones, Germán Rodríguez, Maximiliano Rodríguez
Asistente de dirección: Martín Papi
Escenografía: Julieta Potenze
Vestuario: Maite Corona
Luces: Paula Fraga
Diseño coreográfico: Pedro Frías
Diseño gráfico: Nicolás Cutini
Producción ejecutiva: Miguel Ángel Ludueña
Dirección Germán Rodríguez

Martes 20:30hs.

Teatro del Abasto – Humahuaca 3549


lunes, 1 de agosto de 2016

El terror a la hoja en blanco. Sobre Los fantasmas de Florencio.
Por Valeria Arévalos

Crear e imaginar es maravilloso y lo mejor es que todos podemos hacerlo”

Noche plagada de sombras y sonidos misteriosos. Está a punto de cumplirse el plazo para que Florencio escriba una obra y, así, esquive la maldición del fantasma que pesa sobre ese teatro. Si la imaginación no acude a él, sus puertas cerrarán para siempre. Así comienza este infantil escrito y dirigido por Cristian Vélez. El grupo La pared invisible, tras once años de trabajar con el niño como espectador, entiende la sensibilidad infantil y la estimula en cada momento del relato.


La obra busca ahondar en el mundo de los sueños y de la creatividad, rompiendo con el mito que asocia al artista con el talento. En Los fantasmas de Florencio lo importante es atreverse a correr los propios límites. Así fue como los personajes de Misia y Pedro, dos chicos modernos que viven a través de su TabletCompuCeluPlay, irrumpen en la pesadilla de Florencio y le dan el material necesario para que este escriba su obra. Los chicos se enfrentarán a una serie de pruebas (Pensar, Sentir e Imaginar) y al no tener la ayuda de la tecnología deberán confiar en ellos mismos. Ellos solos (y juntos) van desplegando las palabras que conformarán la obra de Florencio y, a medida que superan las pruebas, van confiando más y más en sus propias habilidades y sentimientos.


Los fantasmas de Florencio es una creación que no subestima al público más pequeño y lo impacta con variedad de estímulos: desde canciones y coreografías, pasando por muñecos y dinámicos decorados, hasta imágenes proyectadas sobre la pantalla.


La puesta está a expensas de la diversión: ofreciendo movimientos y estrategias visuales: corridas, pelea de espadas y saltos; así como también los acerca tangencialmente a la obra de W Shakespeare representando en clave cómica la famosa escena del balcón de Romeo y Julieta.
Los fantasmas de Florencio seguirán haciendo de las suyas en cartel post vacaciones de invierno, los sábados y domingos de agosto a las 16hs.


Teatro Carlos Carella
Bartolomé Mitre 970
Entrada General: $80  
Reservas: 4345-2774 / cjvelez@hotmail.com

Ficha técnica:

Elenco (por orden de aparición):
Ezequiel Davidovsky (Florencio/ Duende-Esqueleto/ Fantasma)
Cristian Sabaz (Productor/ Zombi)
Mariano Falcón (Pedro/ Joven Chico)
Eleonora De Souza (Misia/ Joven Chica)
Cecilia Milsztein (Escenógrafa/ Bruja Hechicera)
Escenografía: Marco Gianni
Realización de títeres y diseño de vestuario: Elina García Garrido
Realización de vestuario: Marcela Di Tomaso
Maquillaje: Julieta Samamé
Diseño audiovisual: Pedro Palacios
Fotografía: Andrés Caffarena
Diseño de luces e iluminación: Fermín González
Maquinistas: Rodolfo Gómez, Gustavo Acosta y Diego Schultz
Prensa: Correydile
Composición musical: Daniel Santillán
Asistente de dirección: Martina Cribari
Dramaturgia y Dirección: Cristian Vélez.
Duración del espectáculo: 60 minutos


El fuego inextinguible. Sobre Negro animal tristeza de Anja Hilling.
Por Valeria Arévalos

Tenés un presentimiento. Pensás nada será como era antes, pero no estás seguro.”

El atropello irremediable del destino, ese instante preciso en donde lo que parecía alegre y cotidiano se torna insoportablemente siniestro. Ese revés que nos pone de cara con la muerte y su inevitabilidad. Seis adultos y una beba ingresan al bosque para pasar un momento juntos. No todos saldrán. Allí, entre los árboles, las pasiones encontradas encenderán la chispa que desate la tragedia. Los vínculos, al igual que sus ropas, luego sus pieles, se irán despellejando hasta convertirse sólo en el recuerdo de lo que alguna vez fue. Después del fuego, jirones. Después del fuego, sólo un amorfo animal ennegrecido y el vacío.



Negro animal tristeza de Anja Hilling nos enfrenta, desde un texto segmentado y duro, con el vacío que alberga la tristeza. Un relato, que empieza frío hasta consumirse en las llamas, nos conmueve con los despojos cenicientos sobrevivientes del caos. Los personajes se sumergen en la vacuidad que deja el dolor y nosotros, como espectadores, nos encontraremos más de una vez sofocando el llanto. En determinado momento, “a lo Brecht”, tendremos una escena distanciada que le aportará un humor negro necesario a la trama, dando un respiro en medio de tanta desolación.


El diseño escenográfico de Magalí Acha, en perfecto maridaje con las luces de José Binetti, recrea ese espacio bucólico devenido infernal. Grandes estructuras movibles irán poblando el escenario de agujeros y recovecos, por donde se filtrarán deseos y engaños, la vida y la muerte. A nivel estético se puede pensar en un espacio mapplethorpiano, enmarcado y sensual.


Los trabajos actorales fluyen dentro de una puesta delicada y, a la vez, profunda. Se nota la impronta que Carla Llopis (directora) trae de la danza. Cada paso de esta pieza irá en un in-crescendo sensible hacia la resolución final. Devenir que irá de la mano de Juan Pablo Martini, que no sólo interpreta la música de la obra en vivo, sino que ingresa por momentos a ese bosque en llamas aportando guiños de teatralidad.



Sin dudas Negro animal tristeza es una de esas obras que quedarán resonando en el alma más allá de las cuatro paredes del teatro. El pasado viernes finalizaron la primera temporada en Buenos Aires así que habrá que estar atentos esperando el regreso.

Ficha técnico artística




La cara oculta del dolor. Sobre Ya nadie nota tu dolor

La cara oculta del dolor
Sobre Ya nadie nota tu dolor de Andrés Binetti
Dirección: Binetti – Teuly

Por Vivi Montes

            Ya nadie nota tu dolor se autoproclama como una conferencia performática en la que siete actores trabajan con sus miedos y sus sueños. A partir de esta consigna construyen un relato que nos interpela desde la intimidad más despojada. Así se plantea la obra, y acorde al lenguaje de los sueños y del miedo el relato es fragmentario, una suma de momentos entre los que destacan “quiero vivir en una película” y “el acumulador de likes”. Jugando entre los polos actor y personaje e incorporando nuevos usos de las tecnologías como dispositivos integrantes de la escena en distintos niveles (como técnica por ejemplo), la obra se plantea como un desafío. Se trata de un juego con las reglas explícitamente cambiadas, los actores anuncian la libertad del espectador para dejar el celular prendido y atender mensajes o llamadas, lo autorizan a retirarse de la función si se encuentra a disgusto y proponen un pacto otro; los personajes no se fundan en la necesidad de crear empatía con el espectador, más bien hacen pie en el patetismo que supone bucear en los sentimientos más profundos, más ocultos. Sin embargo, la identificación de a ratos sucede y el ambiente que se crea en torno a esta conferencia performática es distendido, entretenido y por momentos se acerca a la íntima interpelación del espectador.
  


Ficha artística-técnica
Actores: Pascual Carcavallo, Tomás Coxe, Sofía Fernández, Natalia Godano, Tomás Landa, Tomás Pippo, Lucía Tirone 
Coreografía: Marcela Robbio 
Iluminación: José Binetti
Diseño Grafico y Fotografía: Bárbara Sansile
Prensa: Marisol Cambre
Producción: María Miguens
Dramaturgia: Andrés Binetti
Dirección: Andrés Binetti y Catalina Teuly

Sábados | 21.30 h. Patio de actores | Lerma 568 | CABA

En Facebook: Ya nadie nota tu dolor

sábado, 30 de julio de 2016

Pico de Rating, teatro multimedia. Cuando la televisión supera la realidad.
Por Betiana Schneider

Una familia de clase media educada por y para la televisión. En esta historia los protagonistas no son sólo los actores, sino también la pantalla. Un teatro multimedia, algo novedoso que nos muestra la costumbre del uso de la televisión.


¿Qué pasa cuando la televisión pasa de la ficción a la realidad? ¿Cuándo invade todo nuestro mundo para convertirlo en real, o creernos qué eso es la realidad?



La protagonista Ana está obsesionada por salir en la tele, por protagonizar los programas mediáticos y ser una  “estrella de televisión”, pero le ganan de antemano, su rival, que salió a la fama por grabarse un video en clase, Pamela, está en el programa al que ella anhela con todo su ser ir. La familia de Ana, inmersa también en el mundo de la televisión como muchos dejando la tv prendida largo rato, colabora para crearle a Ana su mundo paralelo. Entre los enredos familiares, un padre que se opone a su carrera pero disfruta de la de Pamela, una madre docente que ve en Ana sus sueños reprimidos por su marido y un hermano que vive para crear ficciones que su hermana cree reales pero lo que más le importa está atravesado por una historia de amor y un productor que viene a poner la frutilla sobre la torta.



“Pico de Rating”, la obra multimedia de Luciano Saíz,  pone en cuestión si ser famoso es lo mismo que tener talento,  si tener talento es salir en la pantalla. Cuando alguien se plantea ser actor, vivir de la profesión, se  confunde esa pasión con la fama, se entrelaza con salir en la pantalla  y “pegarla”.  Es algo que pasa habitualmente cuando creamos un dios a través de la televisión, si creemos aquello que es ficción que supera todo límite e invade nuestra realidad para creernos que lo que está allí es más valioso que lo real que tenemos. Nos invade todo nuestro ser hasta destruir nuestra propia realidad.

Pico de rating: Viernes 23 hs en Espacio Urbano, Acevedo 460 

Elenco en escena:
Gonzalo Capel, Leandro Lara, María Cecilia Cervini, Florencia Bernachia y Federico Capel.

Elenco proyectado:
Pedro Bearzi, Lucio Santilli, Caro Rey, Oscar Reyes y Nicole Goette.

Ficha técnico artística:
diseño de luces: Lucía Feijoó.
vestuario: Denise Rodríguez.
diseño gráfico: Luciano Saiz.
fotografía: Natalia Nobile.
música: Elefante Mutante.
imágenes multimedia: Rocío Busacca, Nico Trullás.
voces tv: Carlos Bisigniano, Vero Carelli y Martín Castillo.
asistencia audiovisual: Julio Brieschke.
filmación: Sergio Falleti y Gustavo Paulino.
maquillaje: Heroica Make Up.
sonido: Grod Morel.
vj y asistencia de dirección: Mercedes Invernizzi.
dramaturgia y dirección: Luciano Saiz.

viernes, 29 de julio de 2016

Estúpidos y sensuales 90'. Sobre Impresión Animal de Melisa Freund

Estúpidos y sensuales 90'
Sobre Impresión Animal de Melisa Freund

Por Gabriela Pignataro


¿Hay acaso recuerdo más híbrido en nuestros imaginarios, que la imagen lustrosa de los 90'?
Los pasos de varias generaciones embebidos en el sensual olor de las ficciones: juguetes importados, electrodomésticos que irradiaban escalafón social, viajes al exterior embadurnados en bronceador.
El todo x $2 como lema rodeado de neón de una realpolitiks que se vierte sobre los cuerpos y vínculos como una masa de gel devaluante y empobrecedor.
En Impresión Animal los personajes se ven asediados, enervados, trasfundidos por este denominador común que entrama relaciones de poder disfrazadas de beneficencia y falsas promesas.
Fernando un negociante de clase media venido a nuevo rico, deslumbrado por los castillos de naipes del nuevo consumo; se fragmenta psicológicamente cuando todo se derrumba hacia fines del 2001.
La pesadilla es en rewind: desde la oscuridad de quien ha padecido su propia tortura se nos despliega un time-lapse escénico de los últimos días que llevan al desenlace con el que se nos bienviene.
En este movimiento que rebobina los recuerdos, se entrama la relación entre Fernando y su empleado paraguayo, dialéctica de patrón disfrazado de cordero que mueve los hilos a su favor sobre la buena voluntad (y necesidad del otro).
El relato se desplaza en arme y desarme, de los personajes y escénicamente también. Cajas, cajas y más cajas. Columnas y filas, que se apilan, crecen y decrecen, rotan y se abren, albergando las veces de hogar, de negocio, de oficina y depósito. Y que fueron sino los 90' que un caldero de ingredientes inconclusos de sueños truncos, de espejos que deformaban los rostros.
Las cajas se mueven lento, como el paraguayo que pide lo propio: - el salario, Fernando, para la habitación.
Ese deseo como sostén para rodar la máquina que poco a poco, empieza a fallar.
Impresión Animal narra la caída en picada de una clase social con las reservas de no exhibirnos los restos. Eso lo sabremos cuando las cajas se cierren.


Impresión Animal de Melisa Freund
Con:
Santiago Fondevila
Hugo César Martinez


Marcela Groppa
Mara Raicevic
Diseño de iluminación: Ricardo Sica
Diseño espacial: José Escobar
Diseño de vestuario: Sol Ruiz Luparia
Diseño sonoro: Julián Rodriguez Rona
Diseño gráfico: Pulpografía
Asistencia de dirección: Mara Raicevic, Arturo Federico
Dirección: Melisa Freund


Jueves 21:00 hs. El Kafka espacio teatral, Lambaré 866, CABA.

jueves, 28 de julio de 2016

El campo, los cuerpos y un fuego silencioso que todo, lo devora. Sobre El Familiar de Gabriel Fernández Chapo

El campo, los cuerpos y un fuego silencioso que todo, lo devora
Sobre El Familiar de Gabriel Fernández Chapo

Por Gabriela Pignataro

Un Tucumán en llamas, mucho antes de arder, nos tracciona desde un presente impreciso hacia principios del siglo XX. En los ingenios azucareros, lo dulce se vuelve veneno, bajo el yugo explotador de los patrones y capataces que ejercen dominación en una perversa dialéctica de persecusión y la sugestión. El látigo del poder repica con varias lenguas: los aprietes y amenazas y la edificación del terror invisible: el mito de El Familiar. Una bestia sin cara, con sombra, y riestra de sangre a su paso, que chupa a la disidencia obrera hacia la zona del no retorno.
La obra, como un espejo circular, nos refleja las caras dolientes de una familia campesina atravesada por la tragedia a través del tiempo, desde 1930 hasta las espectralidades de la dictadura. Una genealogía de hombres animados por el espíritu de la rebelión y de mujeres eyectadas a la espera, el descuerpe y la silenciosa resistencia.


La voz que testimonia, sobrevive los fuegos y desde una silla a la vera de una luz tenue, nos narra añejada y parsimoniosa las estacas en el cuerpo familiar.
Ella ha sido la niña, la esposa y la madre que creció al pie del abismo del eco de El Familiar, que voraz y hambriento “se come” a los hombres de tres generaciones que levantan su puño en las narices de los opresores de cada época.
Anarquistas, peronistas y comunistas, ismos de cuerpos que desaparecen en las garras humanas del mito, succionados a la evanescencia de la desaparición.
La historia familiar como condensación de un país y sus terrores, micromundo de heridas, de lucha y de espera; se construye aquí en punzante relato dramático habitado con intensidad y sutileza bajo una poética de una memoria que al nombrarse se ilumina.

“El Familiar” de Fernández Chapo es una obra de luces y sombras, de espejos que se reflejan unos en otros, donde las voces y los recuerdos entran y salen;y en la evocación, se reconstruyen. Una familia que se sesga, se parte, se lacera. Una familia que es, todas las familias del gran tejido de la memoria.
La obra, nutrida de viscerales actuaciones que se desdoblan, reencarnan una y otra vez en un falso deja vu de lo tortuoso y con una puesta sencilla pero pregnante donde cada objeto presente condensa en sí el mundo circundante; compone así una atmósfera sensible que atravesada de zambas en vivo, trasladan sensorialmente al espectador a una geografía de aire caliente, de ojos que rehuyen, de puertas que abiertas pero sin llave, esperan.
La fuerza del intento de encender candiles que iluminen las fábulas siniestras, alas de cuervo que escondieron los crímenes adheridos a las botas de los totalitarismos, la sombra de los sacos militares agriando toda cosecha a su paso.
Y la vigencia de la denuncia: los casos de lesa humanidad que no soleó la justicia se hermanan con los actuales reclamos salariales y pedidos de visibilidad de las recientes represiones a los trabajadores en Ledesma.
Lo dulce es un veneno, cuando  es cosechado con sangre.


Ficha artístico técnica:
Autor:  Oscar Vázquez
Elenco:  Vivi Vázquez; Marcelo Vilaro; Lautaro Álvarez y Pablo Mounier.
Prensa:  Simkin & Franco
Asistente de dirección:  Natalia Lagos Córdova.
Dirección:  Gabriel Fernández Chapo.
Obra ganadora por la 10° Edición de “Teatro x la Justicia”. El   Ciclo “Teatro x la Justicia”  nace en el año 2007, a partir del encuentro de teatristas que coinciden en la intención de poner en el centro de la escena la Justicia y los Derechos Humanos, manifestándose en ese sentido.