Yo
vengo a ofrecer mi corazón... a cambio de magia.
Por
Valeria Arévalos
Una
sala iluminada dramáticamente, elementos que nos invitan a observarlos
largamente, un pianista (Horacio Pallarés) con mirada serena y a la vez
inquietante, una cantante virtuosa (Virginia Garófalo) cuya energía nos atrapa de inmediato. El falso final de una obra que acaba de
empezar. Así nos espera Gualicho, para cerrar la noche del
viernes en un espacio-tiempo distinto en donde la magia y el misterio nos
transportan más allá.
El
espectáculo (escrito, dirigido e interpretado por
Emanuel Zaldúa) mezcla de manera armoniosa magia y teatro. El hilo conductor es
el ser humano en su deseo de manejar el destino ¿qué está dispuesto a entregar?
¿su alma? ¿su corazón? Y una vez hecha la transacción ... ¿valió la pena? El
negocio de la magia está en decadencia porque hoy por hoy nadie entrega nada. La
mano viene dura. Y es ahí cuando este mago de feria, excéntrico en otros
tiempos, venido a menos hoy, irrumpe sorpresivamente generando necesidades que
luego habrá de cumplir (a cambio del precio que ya conocemos). La composición
de este ilusionista es tan precisa y sutil que por momentos daría la sensación
de que Zaldúa estuviera cantando, como una sirena convenciéndonos de entrar en
su juego. El público, tenso al principio por la posibilidad de su participación,
se entrega al azar y completa la trama.
El vestuario funciona perfectamente como condensador de sentido
así como también el diseño escenográfico. En su totalidad Gualicho nos substrae por una hora de este mundo para pasar a formar
parte de una feria misteriosa perdida en la oscuridad.
Dramaturgia:
Prensa: Octavia Comunicación www.octaviacultura.com
Dirección:Emanuel
Zaldúa
Dirección:
Funciones: viernes
23 hs.
Lugar: La
casona iluminada (Av. Corrientes 1979)
Reservas: 4953
4232
Duración: 50
minutos.
Entrada: $100.-
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