jueves, 27 de abril de 2017

El olfato animal tiene cuerpo: Teatro para perrxs
Por Gabriela Pignataro

¿Sueñan lxs perrxs con humanitxs para domesticar
? Bajo un posible paradigma de inversión de la dominación entre humanos y artefactos, humanos y animales, humanos y su propia animalidad; la obra parafrasea la mítica pregunta sci-fi hacia una zona dónde el género y la especie se erosionan, esculpiendo preguntas: ¿Cuál es el cuerpo colectivo que nos hermana? ¿Existe acaso, la transfiguración de nuestras relaciones sociales modernas hacia la manada? ¿O es la manada que habita, en un sentido antropológico y antiguo, los cuerpos animales, y retorna?
Se despliega en un espacio escénico despojado, con gran economía de los objetos, una serie de movimientos corales con desplazamientos y emplazamientos singulares, repeticiones dinámicas que escriben corporalmente el ritmo, una composición de cariz ritual en un tiempo desafectado de linealidad.


La dimensión de lo circense (con el soporte sonoro como elemento constitutivo de esa otra temporalidad) habilita lúdicamente los juegos oníricos e ilusorios de la feria de la carne, y es en esta instancia bufonesca, dónde la obra halla puntos más sólidos de representación y despliegue de recursos: los cuerpos ofertados como carne, abandonan su especificidad humana para volverse colgajos, lonjas anestesiadas y vilipendiadas.
La crueldad como un terreno propio de nuestro lenguaje, donde la cultura, aquello que nos separa de otras especies, también subvierte en sus construcciones lo bestial e impiadoso que es lo humano sin humanidad.
Teatro para perrxs, intenta preguntarse desde la frontera cómo tejer lazos de solidaridad. Habrá que ladear las orejas, afinar la percepción para oír el llamado de la manada perdida.

Ficha técnico artística
Idea: Beatriz Alvarez, Manuel Cardozo, Gloria Fiol, Constanza Lidueña, Trinidad Llaneza, Carolina Losicer, Joaquín Nudel, Miriam Torchia
Dramaturgia: Fernando Alegre
Escenografía: Fernando Alegre
Diseño de vestuario: Fernando Alegre
Diseño de luces: Fernando Alegre
Realización de escenografia: Manuel Cardozo, Joaquín Nudel
Realización de vestuario: Pedro Muñóz
Video: Matías Erazo
Música original: Mariano Larumbe, Pablo Vila
Música: Lautaro Delgado
Operación de luces: Nicolás Leccese
Fotografía: Gisela Losicer
Diseño gráfico: Fernando Briloni
Asistencia de dirección: Silvia Acevedo
Producción: Fernando Alegre, Beatriz Alvarez, Manuel Cardozo, Gloria Fiol, Trinidad Llaneza, Carolina Losicer, Miriam Torchia
Dirección: Fernando Alegre
Teatro para Perrxs - TrailerTeatro para Perrxs - Trailer
Duración: 60 minutos
CENTRO CULTURAL BORGES
Viamonte 525 (mapa)
Capital Federal - Buenos Aires - Argentina
Teléfonos: 5555-5359
Entrada: $ 150,00 / $ 100,00 - Domingo - 19:00 hs - Hasta el 28/05/2017
Frida Kahlo – Luces y sombras de Patricio Abadi.
Por Gabriela Pignataro

La obra expone el gran desafío que implica trabajar con el imaginario desbordado como altar de los muertos, aquellos cuyo nombre se imprime desde entradas enciclopédicas hasta el souvenir más pequeño, dónde el culto popular levanta ofrendas y agiganta la sombras a través de los años al pie de los velos negros del misticismo que las trágicas biografías encienden, repartiendo los secretos a las manos de los que como fieles moran la historia en busca de algún tesoro.
Hay difuntos vueltos íconos, los hay santos, imágenes cristalizadas en la reproductibilidad, en el mercado del arte y de la fé. ¿Cómo darles un cuerpo insospechado en la imaginería teatral, cuando tantos se han sorteado los retazos de sus ropas? Un cuerpo presentando al ausente, uno posible, no unívoco, imaginado, otra gramática para nombrarlo por fuera de las efemérides conocidas.
En la difusión de Frida, se anticipa que la pieza es parte de una tetralogía de Biografías Ficcionadas, y es a través de la capacidad ficcionalizante que es posible irrespetar la santa imagen de la pintora convertida en delgada estampa for export en los espacios de diseño.
Irrespetar en un sentido de profanación de la imagen sitiada, aniquilada y separada de la exhuberancia fatal en que todo lo que Khalo tocó, hubo convertido.




"La Frida" (como si aquél nombre propio, se hubiera sustantivizado en la común réplica de sus gestos post-mortem) se nos aparece como un brote, un cuerpo reptante que hace génesis en el centro de la escena. Una cama de hospital, sábanas blancas, una mesa de luz, cuadernos, bebida y cigarrillos, bastan para componer un vórtice centrípeto donde confluye toda tensión y toda atmósfera. El resto del espacio escénico se difumina, se torna prescindible. El centro late arrítmico, en los movimientos entrecortados, espasmo de una mujer que lleva en cada centímetro de piel todo su peso. Su rostro cruzado de igual manera por el dolor y el placer,  dimensiones que supo atravesar con prístina intensidad desde los primeros encantamientos del mundo en la infancia, hacia la clausura de este sobre ese mapa vivo lleno de cicatrices.
La estatización de los muertos, como cierto mecanismo de configuración pop, suele omitir las referencias directas  y crudas con lo nauseabundo, lo padeciente, lo maltrecho. El lado oscuro, bajo la forma de lo deforme (valga la redundancia) de los íconos es embellecido tanto como su costado más brillante, despojándolos de alguna manera de rasgos de su humanidad.

Esta Frida en cambio, llora, moquea, babea, delira, se ríe con toda visceralidad, odia y ama en partes iguales que no se anulan, sino que devoran y re-generan a la vez como serpiente de Uróboros. Se ensucia, nos incomoda, su proyección se distancia de las imágenes que probablemente hayamos construido, no nos entrega lo que esperamos. Y es esto acaso, un gesto político, la irreverencia, el gen indomable e inclasificable que volvía a la pintora tan única. Es su singularidad tan específica en una biografía tan compleja, condensada en unos pocos años de vida (apenas 47), que la vuelven imposible de recrear de manera completa, sin fugas, rendijas u omisiones de pasajes.
La obra apuesta a resaltar aristas de la sexualidad, el goce, la mirada sensible, el infinito romance con Rivera, las maternidades frustradas, lo político; bajo las condiciones de la luz y la sombra: ninguna existe sin la otra, se combinan para volver visible aquello que existe. Así como Frida no existió sin su cuerpo lleno de surcos o a pesar de él, existió con aquello como experiencia  habitable desde la cual tendió los hilos surrealistas que vivió como ensoñación encarnada.
Jimena Anganuzzi trabaja una Frida posible, que se aloja en cada movimiento dificultoso, en la lentitud pantanosa, en la conmoción. Darle un cuerpo a Frida es el riesgo mayor y la mejor apuesta frente a una biografía tan memorizada. Es el cuerpo dicente, testigo, contracción y expansión, que nos narra postales nuevas. Un fuera de campo agitado, eléctrico para el retrato que cuelga impávido en las tiendas de diseño.



Ficha técnico artística
Dramaturgia: Patricio Abadi
Actúan: Jimena Anganuzzi
Vestuario: Paola Delgado
Escenografía: Paola Delgado
Iluminación: Ricardo Sica
Maquillaje: Merlina Molina Castaño
Diseño sonoro: Malena Graciosi
Fotografía: Nora Lezano
Asistencia de dirección: Paula Marrón
Prensa: CorreyDile Prensa
Dirección: Patricio Abadi
Duración: 50 minutos

CENTRO CULTURAL DE LA COOPERACIÓN
Corrientes 1543 (mapa)
Capital Federal - Buenos Aires - Argentina
Teléfonos: 5077-8000 int 8313
Web: http://www.centrocultural.coop
Entrada: $ 230,00 - Sábado - 20:00 hs - Hasta el 24/06/2017 


martes, 25 de abril de 2017

“Las infinitas capas del ser” Sobre “Peer Gynt”

“Las infinitas capas del ser”

Sobre “Peer Gynt” de Henrik Ibsen

Adaptación y Dirección: Juan Cruz Forgnone 

 Por Julia Goldberg

¿Cuántas capas del yo se pueden develar en una vida, en una obra de teatro, en un sueño? En Peer Gynt, obra que Henrik Ibsen escribió en 1867, el protagonista es un joven mentiroso y soñador atravesado por los relatos que le contaba su madre cuando era pequeño. Empujado por su objetivo de convertirse en emperador Peer Gynt irá chocando con su propia naturaleza,  y a partir de aquí su búsqueda será la se encontrar su identidad, ser “el mismo”. Quizá Ibsen también buscaba respuestas sobre quien era él mismo, y en esa búsqueda construyó un personaje conformado por todas realidades y fantasías que atravesaban su propia historia.

En esta magnífica puesta de Juan Cruz Forgnone, la cebolla se abre en capas construidas con una delicia y sensibilidad que permiten al espectador viajar de una a otra como quien salta en el aire de un trineo a una nube. Y así la obra se convierte en viaje fantástico. Cada personaje, cada creación actoral, sostiene con gran potencia las bases de ese recorrido que Peer Gynt, moldeado a la perfección por Federico González Bethencourt, nos revelará en un espacio sin escenografía pero con la ayuda de un vestuario y utilería diseñados con la delicadeza que merecía una travesía como ésta.

A través de la sátira, el juego imaginario y la emoción, la obra describe las interminables y contradictorias formas en las que un ser se puede develar. Ningún detalle está librado al azar, porque cada detalle es parte y repliegue del tan humano y encantador Peer Gynt. Cada escena es un nuevo territorio, teñido de diferente texturas, a base de variados materiales, voces, dinámicas físicas, climas, musicalidades. Y todos esos elementos  conviven armónicamente en el caótico devenir del protagonista en busca de una identidad inalcanzable. Porque finalmente Peer Gynt no es otra cosa que ese caos, esa infinidad de capas, imponiéndose una sobre otra según la circunstancia.

 Por eso esta adaptación de Peer Gynt es una nueva obra, una nueva construcción con nuevas formas de revelar más y más capas. Una nueva búsqueda a través de  ese viaje infinito por el Ser, o por la fantasía del Ser.


FICHA TÉCNICA

Actores 
Federico González Bethencourt  (Peer Gynt)
Maiamar Abrodos  (Åse)
Leilén Araudo  (Solveig)
Agustín Scipione  (Aslak, Rey de Dovre, Sinuoso, Pasajero Desconocido, Enlutado)
Vanina Dubois  (Fanny, La de Verde, Pájaro del mal agüero, Enlutada)
Rubén Parisi  (Hans, Cortesano Troll, Sinuoso, Pastor, Fundidor de Botones)
Manuel Reyes Montes  (Mads Moen, Edecán Troll, Sinuoso, Marinero, Enlutado, Un flaco)
Florencia Barral  (Irene, Ingrid, Princesa Troll, Sinuoso, Enlutada, Mujer que caza pájaros)
Ulises Martínez  (Músico en boda, Músico Troll, Músico peregrino)
Emanuel Moreno Defalco  (Músico en boda, Músico Troll, Enlutado)

Diseño de Escenografía Rahie Rched
Asistencia de Escenografía Caterina Cavalieri y Belén Clemente
Diseño de Luces Jessica Tortul
Diseño de Vestuario Cecilia Gómez García
Música Original Andrés Giraldo
Diseño Sonoro Delinda Ravone
Diseño Gráfico Agustín Scipione
Fotografía Franco Vaca Braylan
Producción Artística Bruno Martellotta
Asistente de Dirección Daniela González
Dramaturgia Henrik Ibsen
Traducción Rosamaría Paasche
Dirección y Adaptación Juan Cruz Forgnone
Duración 110 minutos

Miércoles 21:30hs
El Portón de Sánchez - Sánchez de Bustamante 1034




domingo, 23 de abril de 2017

La resistencia. Sobre “Tomar la Fábrica” de Joselo Bella, Ricardo Díaz Mourelle y Pedro Sedlinsky

La resistencia

Sobre “Tomar la Fábrica” dJoselo Bella, Ricardo Díaz Mourelle y Pedro Sedlinsky

Por Julia Goldberg


                El título de la obra parece engañar, pero no. Es verdad que en escena no veremos obreros con su mameluco desgastado y pancartas a tono. Lo que si se escuchará es una alusión recurrente a “Los compañeros”, la gran película que Mario Monicheli filmó en 1963, donde se cuenta la historia de un grupo de obreros que decide hacer una huelga reclamando la reducción de la jornada laboral. Quienes aluden constantemente a esta película serán los dos personajes de la obra, dos actores, pero no de esos que no saben si optar por un ofrecimiento en la televisión o uno para hacer cine, sino de aquellos que se desgarran por lograr un bolo que les permite llegar a fin de mes.

            Dos actores que se encuentran con la excusa de cocinar la comida preferida de la hija de uno de ellos que está por llegar. Una excusa para este encuentro de resistencia, donde para sobrellevar los avatares de este oficio tan frágil, ellos irán relatando sus propias historias. Las historias de sus padres, de su niñez, de sus amores, del arte que los inspiró, de sus sueños, sus triunfos y sus derrotas. Y entonces ese contar la propia historia de algún modo será hacer esa obra que nunca pudieron terminar, será finalmente tomar la fábrica.

             Poner en juego la propia historia, ese material del que estamos hechos y el que reconstruimos día a día. Apropiarse de la propia historia para sentir que no es tan diferente a la del otro, y que entonces no estamos tan solos. Esta obra es eso tan simple y tan profundamente hermoso. Eso que nos muestra que a pesar de todo, encontrarnos para recrear nuestras propias historias es una gran forma de resistir al menos, como diría Marcello Mastroianni en Los Compañeros, “una hora más”.


Ficha artístico  técnica:

Elenco:
Juan: Joselo Bella 
Franco: Ricardo Díaz Mourelle
Autores: Joselo Bella, Ricardo Díaz Mourelle y Pedro Sedlinsky
Escenografía y vestuario: Alejandro Mateo
Diseño de iluminación: Matías Canony
Música original: Rony Keselman
Diseño coreográfíco: Micaela Racciatti
Diseño gráfico: Matías Canony
Asistencia de dirección: Josefina Flores 
Prensa: 
Octavia Comunicación
Producción ejecutiva: Miguel Angel Ludueña
Dirección: Pedro Sedlinsky

Funciones: domingos, 19:00 hs.
Teatro: 
Nün Teatro Bar (Juan Ramírez de Velazco 419, CABA)






viernes, 21 de abril de 2017

La materialidad difusa de la realidad. Sobre La vida de ella


La materialidad difusa de la realidad
Sobre La vida de ella
 

Por Vivi Montes 


            En un universo liminal transcurre La vida de ella. En un entre -entre dos, entre lo real y lo onírico, entre velos- se despliega esta puesta en la que diferentes lenguajes confluyen, se funden y se confunden en una reflexión sobre la realidad que se construye y se desdibuja ante nuestros ojos; sobre la percepción de eso que comúnmente llamamos realidad. En la obra dirigida por
Mariana Blutrach y Daniel Böhm se muestra una realidad hecha de capas, de pliegues que funcionan como un cruce de mundos y atrapan.

     Esa realidad de difusa materialidad que se expresa en el universo poético de La vida de ella se compone también de cuerpos que danzan, de imágenes proyectadas, de música y de luces que llevan el ritmo y la intensidad de los cuerpos. Un universo donde la palabra encuentra poco lugar y tal vez no requiera ninguno. Una experiencia en la que lo teatral y lo cinematográfico conviven en la escena. La vida de ella es un territorio de sombras y vivencias a media luz, de susurros apenas audibles y de presencias que se imponen como gritos, de ternura y violencia, de pausas y silencios, de relaciones que se construyen y se destruyen; un territorio límite en el que límite en sí mismo carece de valor, es en el cruce, es en el entre donde la obra, como la vida sucede. 

     No hay una sola narración posible a la pregunta por la historia que la obra cuenta, porque la historia tiene la materialidad de la que se construye la realidad. Es una suma de situaciones confusas, de momentos de intensidad perceptiva y de la belleza de la emoción que no se explica. La vida de ella es una obra que juega al límite, con gran calidad en la concepción y en la ejecución de los diferentes niveles y lenguajes que la puesta transita. No nos ofrece una historia, sino un universo poético en el que perdernos y disfrutar.


Ficha técnica
Dirección general: Mariana Blutrach y Daniel Böhm
Idea y Coreografía: Mariana Blutrach
Puesta en escena y realización audiovisual: Daniel Böhm
Elenco:
Ella: Romina Pedroli
Él: Federico Ottavianelli “Vruma”
El otro: Gustavo Lesgart
Pianista: Valentín Jarach
Nena: Catalina Godoy D´Orta / Alina Keselman
Vestuario y Arte: Laura Copertino
Diseño de iluminación: Nicolás Trovato y Carla Lucarella
Sonido y Música original: Facundo Gómez
Edición y Operación de video: Lucas Casolo y Daniel Böhm
Asistentes de dirección: Melina Serber, Sofía Nicollini
Producción general: Ana Jelín
Diseño gráfico: Agustín Ceretti
Cuarteto de cuerdas: Cuarteto Sur (Dir. Joaquín Chibán)
Realización de vestuario: Nora Dell´Oro y Pablo Cabrera

Funciones: sábados 21 hs. (Hasta el 24 de junio inclusive)
Lugar: El Portón de Sánchez (Sánchez de Bustamante 1034, CABA)